¿Cuándo cambiar de escuela? Sí, sabemos que es una pregunta difícil de responder que te puede generar dudas e, incluso, temor.
Por ese motivo, en este artículo compartiremos una lista de situaciones en las cuales es ideal cambiar de institución para continuar con tu formación universitaria y, así, construir un futuro exitoso.
Entonces, ¿estás preparad@ para saber en qué contextos conviene dar este paso? De ser así, ¡no dejes de leer!
Sin duda, esta es una de las situaciones en las que, de inmediato, debes proponerte cambiar de escuela.
Un programa académico deficiente es lo peor que puedes experimentar como estudiante universitario, pues te hará perder tu tiempo y no te garantizará que tengas capacidad competitiva una vez que comiences la vida laboral profesional.
Pero, ¿cómo identificar que un plan de estudios es de poca calidad? Existen muchas señales, como:
Por otro lado, debes asegurarte de que el programa que hayas seleccionado esté avalado por el Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios (RVOE).
Si no posee este certificado de la Secretaría de Educación Pública (SEP), lo ideal es buscar otra opción de institución. Y es que un plan de estudios sin reconocimiento oficial no te dará la credibilidad necesaria para acceder rápidamente el mercado laboral profesional.
Además, dificultará que puedas adquirir la cédula profesional y realizar muchos otros trámites con tus documentos académicos.
Antes de inscribirte en tu actual institución, seguramente te hiciste ideas y expectativas sobre la misma.
Ahora que estudias en ésta, ¿la universidad es tal como la esperabas? ¿Sí cumplió con las expectativas?
En caso de que te haya decepcionado, producto de la baja calidad del profesorado, la deficiencia de los programas o cualquier otra razón, conviene que des el paso de cambiar de escuela.
Es importante que realmente la institución te haga sentir a gusto y sea fiel a las cosas que te prometió y ofreció antes de la inscripción.
Una universidad, como toda organización, ofrece un servicio. Por eso, analiza si el que estás recibiendo realmente es de calidad.
En el plano universitario, un servicio de calidad es mucho más que programas académicos efectivos y un profesorado con experiencia y capacidad de enseñanza.
También, conlleva personalización, buen trato y diferentes valores agregados, que mejoran la experiencia de los alumnos.
Por ejemplo, las universidades de calidad cuentan con programas de empleabilidad y emprendimiento que representan apoyos adicionales para la comunidad estudiantil.
También, ponen a disposición de los alumnos grupos de mentores que los acompañan y asesoran en sus vidas universitarias.
¿Tu actual universidad cuenta con características tan valiosas como éstas? Si la respuesta es “no”, piensa en buscar nuevos y mejores horizontes.
Muchas veces, el problema no es la institución en sí, sino la licenciatura que eligen los estudiantes.
Tomando en cuenta esto, es momento de que evalúes si realmente elegiste la alternativa académica adecuada para ti, tomando en cuenta tus intereses, objetivos, habilidades, sueños y preferencias.
En caso de que no se trate de la opción adaptada a tu perfil, ¡no te preocupes! Simplemente, analiza qué carreras puedes estudiar al volver a la universidad o cambiar de institución.
Para dar este paso y tomar la decisión correcta, primero es importante que te conozcas muy bien a ti mismo. No descartes acudir a la ayuda de profesionales en orientación vocacional.
No olvides que la elección de una carrera universitaria impactará en el resto de tu vida, así que es una decisión que conviene tomar de manera minuciosa y luego de mucho razonamiento.
Este punto también es muy importante. Y es que puede que una carrera cuente con materias interesantes, que estén impartidas por profesores con gran experiencia y profundos conocimientos, pero que a la vez no esté orientada al futuro.
De esa forma, adquirirás múltiples conocimientos, pero pocos de estos realmente te resultarán útiles para ser competitivo en los próximos años y enfrentar con éxito los retos profesionales que están por venir.
Entonces, una buena carrera es aquella que toma en cuenta las competencias digitales y, en general, que te ofrece una capacitación adaptada al futuro y a las tendencias profesionales, laborales y empresariales.
¡No lo olvides!
Independientemente de si asistes a la universidad en Ciudad de México o cualquier otro lugar del país, tienes que tomar en cuenta estos criterios si estás pensando en cambiar de escuela.
Ahora que conoces cuáles son las situaciones o factores que señalan que es conveniente cambiar de escuela, ¡veamos cómo dar este paso con éxito!
Al hacerlo, lógicamente, lo esencial es que te enfoques en encontrar una universidad de calidad para continuar con tu capacitación.
Como ya sabes, una buena institución es aquella que cuenta con programas académicos oficiales y orientados al futuro. También, brinda un servicio de calidad y posee agregados de valor como los programas de empleabilidad y emprendimiento.
Por otro lado, no olvides analizarte muy bien a ti mismo para que, además de elegir la universidad correcta, selecciones una carrera que verdaderamente se adapte a tu perfil e intereses.
También es importante que estés muy atento de solicitar todos tus certificados y documentos de la escuela de la que te marcharás para que no tengas problemas para inscribirte e integrarte a una nueva institución.
¡Buena suerte!
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